El Grupo Parlamentario Socialista del Congreso de los Diputados ha presentado una interpelación a Luis de Guindos, ministro de Economía, para que el banco malo ceda a los gobiernos autonómicos y corporaciones locales, pisos vacíos que puedan ser utilizados por personas desahuciadas o ciudadanos con rentas bajas.
El asunto será tratado el miércoles próximo y el PSOE busca también conocer de primera mano los problemas que ha tenido la Sareb en su primer año de vida en relación a algunas ventas de activos y a sus dirigentes.
El objetivo de los socialistas es que la gestión del banco malo sea más transparente y profesional y que su funcionamiento no sea un coste adicional para los ciudadanos, por lo que quieren saber, de forma exhaustiva, la situación de sus carteras de vivienda, así como la evolución de los precios en el sector.
Para el PSOE, la Sareb debe colaborar en solucionar los problemas más graves que ha ocasionado la crisis a los ciudadanos, como los desahucios por no poder hacer frente al pago de hipotecas, y por este motivo, propone que parte de los pisos vacíos que tiene el banco malo sean utilizados, mediante la intermediación de ayuntamientos y comunidades autónomas, para el realojo de ciudadanos desahuciados o con escasos recursos económicos.
La propuesta socialista coincide en el tiempo con la apertura de un expediente por parte de la Junta de Andalucía al banco malo, por no ceder pisos de protección oficial a demandantes andaluces de vivienda.
El PSOE quiere también que el Sareb defienda el interés general e impida conflictos de intereses en su Consejo de Administración, ya que los bancos controlan la mayoría del accionariado del banco malo y los socialistas les acusan de aplicar “estrategias agresivas y fuertes descuentos” en sus activos.