Después de que el jueves Telefónica anunciara que sobraba el 20% de su plantilla en España, lo que suponía eliminar 6.000 puestos de trabajo durante los próximos tres años, la mayor empresa española no ha tardado ni 24 horas en anunciar pluses millonarios para sus ejecutivos y el reparto de casi 7.000 millones de euros en dividendos.
La noticia saltaba a los medios después de que la compañía enviara a la Comisión Nacional del Mercado de Valores la convocatoria para su próxima junta de accionistas, prevista para el próximo día 18 de mayo.
En ella Telefónica propone premiar a sus directivos, durante los próximos años, con casi 450 millones de euros. Es decir que al mismo tiempo que elimina a 5.900 trabajadores -en una de las crisis económicas más duras de la historia- también proyecta “repartir” casi medio millón de euros entre sus directivos.
Según ha publicado el diario El País, el reparto se haría en acciones de la empresa y para el Presidente Ejecutivo de Telefónica, César Alierta, corresponderían como máximo en el primer bloque de reparto (a partir de julio de 2011) un lote valorado “en unos siete millones de euros y la de los otros dos directivos, en unos 6,5 millones”.
Gobierno y sindicatos expresaron su malestar por el anuncio de Telefónica por sus peculiar “ERE” en momentos de paro tan acuciante. Ahora no faltan las voces que piden explicaciones y exigen actuaciones que impidan este tipo de maniobras.