Respecto a esta propuesta el principal opositor es Alemania que insiste sólo en el pacto de austeridad fiscal para mantener a raya la deuda.
A pesar de que Francia y Alemania han actuado prácticamente como un solo bloque frente a la unión europea, esta relación podría romperse; pues Francia se ha abierto ya a la idea de la ampliación del fondo.
Pareciera en todo caso, que los resultados son bastante fáciles de anticipar. Se buscará una revisión de los tratados que incluya no sólo a los países de la eurozona, aunque esto debe vencer las resistencias de Londres a la autonomía para la regulación fiscal.
Del mismo modo, parece imponerse la propuesta francesa de fijar el 2016 para mantener una deuda monto cero, e incorporar una cláusula en cada estado, para mantener la austeridad del gasto público, a partir de la prohibición de aumentar la deuda.
De este modo se pretende que el tribunal de Luxemburgo sea el encargado de velar por el cumplimiento de esta “regla de oro”, para lo cual se incorporarían una serie de sanciones para los Estados incumplidores.