Rajoy prepara una estrategia para solicitar a la Unión Europea, que la meta de déficit 2012 para España pueda ser revisada en un margen algo superior al 5%, con el principal argumento de que finalmente el déficit 2011 se disparó desde las previsiones de 6% hasta un déficit real de 8,8%. Sin embargo se trata de una apuesta dudosa; pues Rajoy había insistido no el 4,4%; sino en el 4% como meta de déficit; y por otra parte, Bruselas ya había arrojado ciertos rumores sobre la transparencia de las cifras déficit y el retraso del presupuesto anual.
Esto da muestras de una política fiscal dubitativa, por una parte; pues ya son muchas las medidas que el gobierno ha tenido que revisar y desandar; y por otra parte, Bruselas duda de las cifras de déficit como estrategia para suavizar el ajuste.
Puede ser que el gobierno se esté dando cuenta que el recorte no sirve para frenar la recesión y el paro. Lo que sería al menos un avance; pero debe tener una actitud de mayor seriedad con los compromisos y acuerdos con Bruselas. Este carrusel de porcentajes, ajustes y sobreajustes se evitarían con un diseño preliminar más maduro.