El ministro de Finanzas de Merkel y no el presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy, se ha permitido el lujo de explicar en rueda de prensa la incidencia de la huelga general del 29-M y ha dado su bendición a los Presupuestos Generales del Estado, que el Consejo de Ministros aprobó ayer, con un recorte de 27.000 millones de euros, que dejan temblando partidas tan importantes para el desarrollo de un país civilizado como Educación, Sanidad o incluso las políticas activas de Empleo.
Sin embargo, para el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, estos presupuestos aprobados por el Gobierno español “van en la buena dirección” y considera que su aplicación resulta imprescindible para España y para la Unión Europea. Las explicaciones del responsable de Finanzas del Gobierno de Angela Merkel, vienen así a suplir la falta de comparecencia del Presidente de España, Mariano Rajoy y plantean dudas sobre quién gobierna realmente nuestro país.
El líder del PP y del Ejecutivo español ha sido criticado por no dar la cara, tras aprobar los presupuestos más severos de toda la democracia, tan sólo un día después de una huelga general en la que salieron a la calle cientos de miles de personas en numerosas provincias de España y que fue seguida por un 77% de los trabajadores.
No obstante, Wolfgang Schäuble ha señalado que “la huelga general no tuvo bastante apoyo como para impedir que el Gobierno continúe con las reformas, que son necesarias”; erigiéndose así en una especie de portavoz del propio Gobierno de España y asumiendo deberes imputables al presidente Rajoy.
Por si fuera poco, el ministro de la canciller de Alemania se ha permitido el lujo de sentirse “esperanzado”, añadiendo que confía “totalmente en el Gobierno español, en el parlamento español, en que España resolverá los problemas”; palabras más propias del dirigente de una nación que del ministro económico de otro país.
A pesar de las bondades que el improvisado portavoz ve para la economía española en los nuevos Presupuestos Generales del Estado, baste como dato el aportado por el presidente de la Asociación Estatal de Directores y Gerentes en Servicios Sociales, José Manuel Ramírez Navarro: Sólo el recorte en la partida destinada a los gastos de la dependencia impedirá la creación de 8.000 puestos de trabajo.
Esa pérdidad de 8.000 posibles trabajadores parecen un sacrificio un tanto maquiavélico, diga lo que diga el vocero de Merkel.
Imagen: Cadena Ser