Luc Coene, miembro del consejo directivo que dirige el BCE, ha comentado que el Banco Central Europeo no debería seguir interviniendo en la resolución de la crisis del euro.
Estas declaraciones han sido publicadas en los periódicos belgas “De Tijd” y “L´Echo”, en las que afirma que tienen que ser los estados miembros de la Unión Europea, quienes, a través de su esfuerzo y de sus reformas estructurales económicas, consigan resolver la situación actual.
Coene reitera que “el BCE no debería hacer ninguna intervención más, pues al hacerlo quita presión de los gobiernos que son responsables de reformar su economía“.
En opinión de este experto economista, las subidas de las primas de riesgo de las países periféricos de la Unión Europea se deben a la desconfianza que tienen los mercados en España e Italia, en que sus respectivos gobiernos puedan acometer reformas de amplio calado, reduzcan drásticamente sus déficits públicos y recuperen la competitividad de sus empresas.
Coene se ha referido a aquellos dirigentes políticos que quieren que sea el Banco Central Europeo quien resuelva la crisis, definiendo sus afirmación como “contraproducentes“, ya que “una intervención del BCE hubiese hecho un flaco favor a los problemas que existen de en los mercados“.
Al ser preguntado por una posible salida de Grecia del euro, Coene, sin entrar en grandes explicaciones, ha señalado que esa situación “sería la peor solución a la crisis de la moneda única“.
Por último, y tras ser cuestionado sobre el futuro de su país, Bélgica, cuyo banco nacional dirige, ha anunciado que a finales de este año aumentará el déficit de sus cuentas públicas.
Marta says
Estoy muy de acuerdo, de hecho como el BCE empiece a resolver algo con sus inyecciones de liquidez a largo plazo el problema aumentaría.