Tras la visita del comisario Olli Rehn a Madrid, hemos sabido que la Comisión apoya en España las reformas llevadas a cabo porque llevan a cumplir con el objetivo de déficit para este año y también que se supone todo preparado para que se pida el rescate.
“Es España la que tiene que pedirlo y eso aún no se ha producido”, repitió Rehn durante su mensaje de apoyo. “La Comisión Europea está lista, dispuesta y preparada para actuar” si España o cualquier otro país lo solicita.
De esta manera, y aunque De Guindos decía que no hay nada previsto aun, Rehn abría la puerta de un posible rescate que, por otra parte, Rajoy quiere postergar el máximo tiempo posible.
El panorama no es nada claro y todo el mundo lanza sus pareceres. Unos dicen que el paquete de reformas viene asociado a un segundo rescate de condicionalidad más baja, otros que Rehn presiona a España para que pida el rescate y así, actúe de cortafuegos ante Francia e Italia y, por último, también se señala que Alemania no tiene ningún interés en acelerar el proceso.
“La Comisión no interfiere, este es un problema entre países, y Rajoy está hablando con todos los presidentes antes de tomar una decisión”, explican en el Ejecutivo con respecto a Alemania. “La Comisión quiere que España solicite cuanto antes la ayuda para evitar que Alemania se ponga aún más dura con las condiciones y en el BCE, y ante la constatación de que tanto la economía española como sus cuentas públicas se están deteriorando”, explicaron fuentes desde Bruselas.