Queda patente la preocupación del organismo ante la debilidad coyuntural de la zona euro. De hecho, los expertos anuncian ya que lo más probable es que el BCE vuelva a rebajar sus pronósticos de crecimiento tanto para 2013 como para 2014. Ya en marzo, los economistas del BCE vaticinaron que la economía de la eurozona se contraerá una media del 0,5%, mientras que para 2014 fijaron un crecimiento del PIB medio de un 1%. Sin embargo, lo más probable es que estas cifras vuelvan a rebajarse fijando un pronóstico para 2013 del -0,6%.
Otras de las principales cuestiones que traen de cabeza al organismo presidido por el italiano Mario Draghi es la acuciante escasez de crédito en pequeñas y medias empresas en todos los países en crisis de la zona euro. Si hacemos caso a lo que indican los economistas, es más que probable que el BCE instaure algún tipo de impuesto penalizador a todas las entidades que depositen el dinero en la entidad europea de forma directa sin hacerlo llegar a la economía real.
Las decisiones adoptadas en el seno del Consejo de Gobierno del BCE, así como sus pronósticos de crecimiento, las comunicará el presidente del BCE en una rueda de prensa esta misma tarde.
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