La idea de que la corrupción en nuestro país es algo generalizado se extiende, ya que según el Real Instituto Elcano, en su último Barómetro señala que el 90% de los españoles consideran España como un país corrupto.
Javier Noya, uno de los autores del Barómetro, ha comentado que “la corrupción, ahora mismo, tiene obsesionados a los españoles porque aparece en todos los medios y los escándalos de corrupción surgen de debajo de las piedras. El ciudadano español da prácticamente la misma importancia a las políticas de imagen que a las políticas para solucionar los problemas reales de la economía: hay que hacer un esfuerzo para cambiar nuestra imagen en el exterior, aunque también en el interior del país”.
En opinión del 65% de los encuestados nuestro país atraviesa una situación muy mala, porcentaje que se queda en cerca del 36% si solo se califica como “mala”.
En relación con las perspectivas económicas en un futuro próximo, los españoles son algo más positivos, ya que casi un 50% piensa que mejoraremos, un 29% que la crisis irá a peor y un 18% que la cosa seguirá como hasta ahora.
Cuestionados sobre la situación actual, el 61% ve la situación peor que antes, un 17% afirma que estamos mejor que antes y un 21% que estamos igual, datos que contrastan con la pregunta de si España necesita un segundo rescate de su economía, algo rechazado por el 71% de los entrevistados, mientras que el 20% se muestra partidario de esa ayuda de la Unión Europea.
Para el 51,4% Europa no está apoyando lo suficiente a España en la resolución de la crisis económica, un 33,8% directamente afirma que la Unión Europea no ayuda en “nada, lo que para Noya es destacable, cuando afirma que “hay que subrayar un dato que me parece dramático: el desamparo que sienten los españoles hacia la Unión Europea. El 85 por ciento de los españoles piensa que la Unión no está haciendo lo suficiente por ayudar al país a salir de la crisis, lo que no significa que los españoles sean euroescépticos”.