Eurostat, Oficina Europea de Estadística, ha hecho pública su segunda estimación acerca del Producto Interior Bruto comunitario y las conclusiones nos llevan a señalar que la recesión persiste en Europa ya por sexto trimestre consecutivo. Las cifras lo dejan claro, el PIB de la zona euro cayó un 0,2% y el de la Unión Europea, un 0,1%.
La recesión o contracción económica se ha generalizado, ha habido un descenso de la actividad económica en las grandes economías europeas, representadas por Francia (-0,2%), España (-0,5%) e Italia (-0,5 %). En el caso de Alemania se ha producido un crecimiento del 0,1% pero, sin embargo, no ha sido suficiente para compensar la caída.
Dentro del conjunto de países de la Unión Europea, las peores cifras se han registrado en Chipre (-1,3%), la República Checa (-1,1%) y Estonia (-1%); por otra parte, los mejores resultados son los de Lituania (1,3%) y Letonia (1,2%).
Si analizamos esto más en profundidad, podemos desglosar el PIB en componentes y así hablaríamos del consumo que se realiza dentro de los hogares, la formación de capital fijo y las exportaciones. En el primer caso, durante el primer trimestre del año se produjo un incremento del 0,1% en la eurozona y en la UE, tras haber experimentado caídas de hasta el 0,6%. Si nos fijamos en el segundo componente, se ha dado un desplome del ,6% en los países de la moneda única y de un 1,4% en los Veintisiete. Por último, las exportaciones entre enero y marzo han registrado un descenso de un 0,8% en la eurozona y de un 0,6% en la UE.