El Banco de España, en su informe sobre la balanza de pagos de los cinco primeros meses del año, destaca que España ha vuelto a tener capacidad de financiación por sí misma, algo que no ocurría desde 1997. Estamos hablando de 2.487 millones de euros, una cifra que contrasta con los 14.309,3 millones negativos del 2012.
De esta manera, la balanza comercial se encuentra en niveles positivos, con un superávit de 704,6 millones de euros, que se explica a raíz de la buena marcha que están teniendo las exportaciones, a pesar de que las importaciones han descendido ligeramente. Con los datos que tenemos, podemos señalar que el déficit acumulado en los cinco primeros meses del año está en los 2.768,1 millones de euros, gracias a la ampliación de superávit no energético y a la disminución del déficit energético.
En la balanza de servicios también despuntan las noticias positivas, ya que hay un superávit de 3.512,6 millones de euros gracias a su puntal del turismo y viajes, que alcanzó nada menos que los 3.084,6 millones de euros.
Por último, es interesante ver cómo la salida de capital extranjero es cada vez más pequeña, ocho veces menor que la registrada en el 2012, momento en que la fuga de capitales estaba situada en 41.284,3 millones de euros.
Los inversores extranjeros sacaron del territorio nacional 5.057,1 millones de euros en mayo, tras inyectar un mes antes 1.958,7 millones de euros, por lo que la inversión acumulada en los primeros meses del año se sitúa en 40.345 millones de euros.