Nuestro país vuelve a atraer la confianza de los inversores internacionales. El bono español a diez años se encuentra hoy a 274 puntos básicos de su homólogo alemán, un nivel que no estaba tan bajo desde hace prácticamente dos años. Este descenso en la prima de riesgo española, en caso de que sea algo permanente, permitiría al Tesoro Público ahorrarse un montante económico anual de entre 3.500 y 6.500 millones de euros en el pago de intereses de la deuda pública española.
La prima de riesgo es una más de las numerosas estadísticas que reflejan la mejoría de nuestro país, dejando atrás la parte más dura de la recesión económica. Entre estos datos podemos destacar la reducción del déficit público durante la primera mitad de 2013, en un 8,2%, dejando el desajuste actual en un 3,81% del Producto Interior Bruto nacional, lo que evidencia el esfuerzo realizado por el Gobierno español en el saneamiento de sus cuentas. Al mismo tiempo, la exportación española, dentro del conjunto de la OCDE, es la tercera que más ha aumentado en lo que va de año y el Tesoro Público consigue financiación a un interés mucho más razonable que hace meses.
A estas cifras hay que sumar el descenso del número de desempleados inscritos en los Servicios Públicos de Empleo, algo que según el Instituto Nacional de Estadística viene produciéndose de forma consecutiva desde hace cinco meses.
A pesar de todo, el Ejecutivo central no lanza las campanas al vuelo y se muestra prudente en la valoración de estos datos tan optimistas. Así, Mariano Rajoy señaló recientemente que “la economía española no goza todavía de buena salud. No está bien, pero está mejor y debemos procurar que siga siendo así, aunque hay que decir que los últimos indicadores económicos confirman la mejoría y hacen prever una recuperación suave y prolongada en el tiempo“.