Más de un 10% de las empresas familiares de nuestro país ha visto mejorar sus cifras en lo que va de año, y el porcentaje se eleva hasta el 22% si hablamos de las que esperan mejorar su situación en los próximos meses.
Es cierto que vivimos una coyuntura económica complicada y los datos lo avalan, ya que un 47,7% de las empresas familiares españolas creen que la recesión se ha agudizado, un 12,8% piensa que se comienza a ver la luz al final del túnel y un 24% espera una evolución positiva de la economía en la segunda mitad de 2013.
La locomotora de la economía española sigue siendo nuestro sector exterior, que ha visto mejorar la internacionalización de nuestras empresas familiares en un 18% durante la primera mitad del año, aunque el dato donde se ve mayor mejoría es el del volumen de ventas.
Los últimos nueve meses se evidencia una tendencia a la mejoría de nuestras empresas familiares, con un sector exportador que crece día a día en sus cifras, algo que también ocurre en el número de trabajadores empleados, aunque la creación de empleo neto aún está lejos de conseguirse.
La cifra de negocios de las empresas familiares presenta una subida espectacular en el primer semestre del año, y una de cada cinco empresas familiares afirma que han mejorado sus cifras en 2013, con la previsión de que esta tasa aumente hasta el 30% si extendemos el análisis al año completo.
Un dato que continua bajando desde el comienzo de la crisis es el precio de venta de los productos elaborados por las empresa familiares españolas, aspecto que este que coincide con el nivel de inversiones desarrolladas en las mismas, que presenta una evolución algo errática, dado que los primeros seis meses del año se ha reducido su saldo, aunque casi un 17% de las empresas familiares hayan mejorado sus datos.