El Ejecutivo español ha decidido que las comunidades autónomas no tengan que devolver al Estado los ingresos que hayan obtenido por el Impuesto de Patrimonio en los últimos años, aunque la ley afirme lo contrario. Esta modificación legislativa que se llevará a cabo en breve permitirá que los gobiernos autonómicos dispongan de 1.500 millones de euros provenientes de los ejercicios de 2012 y 2013.
Las comunidades autónomas han redactado sus presupuestos para el próximo año sin tener en cuenta este dinero que no tendrán que enviar al ministerio de Hacienda, aunque tampoco los Presupuestos Generales del Estado para 2014 han considerado esta partida económica como un ingreso.
El territorio más beneficiado con el cambio de criterio será Cataluña, que solo el año pasado recaudó 301 millones de euros por el Impuesto de Patrimonio, cantidad que para 2013 se calcula en 539 por el aumento de los tipos impositivos que aprobó en su momento.
El Gobierno español, de esta manera, continua adelantando detalles de su próxima reforma fiscal, ya que este asunto ni siquiera ha sido planteado aún en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, órgano en el que se reúnen el ministerio de Hacienda y todos los consejeros autonómicos del ramo.
Desde el ministerio se afirma que “hay que hacer un cambio normativo para que las comunidades autónomas cobren este impuesto, porque, actualmente lo recaudado se descuenta de la financiación territorial“. Pero esta modificación debería aprobarse antes de que entren en vigor todos los presupuestos, tanto autonómicos como nacionales, algo que podría llevarse a cabo mediante la aprobación de enmiendas parciales durante el tramite parlamentario de cada uno de ellos.