A partir de este 1 de febrero, sin este código IBAN no se podrá realizar ninguna operación financiera, independientemente si es un cobro o un pago. Su no uso afectará negativamente a transferencias bancarias, recibos domiciliados y pagos con tarjetas.
Este código añade cuatro nuevos dígitos a nuestras cuentas. Son los siguientes: ES, al tratarse de España, y un dígito de control de dos cifras al que se le añade el Business Identifier Code o BIC, que identifica a la entidad asociada a la cuenta emisora y se compone de 11 caracteres.
No desesperéis pues conocer el código IBAN de vuestras cuentas es sencillo y completamente gratuito. Tan fácil como acudir a vuestra entidad financiera y solicitarlo, os lo darán en el acto. También podéis obtenerlo accediendo a vuestras cuentas a través de Internet. En el caso de las compañías, si desde el 1 de febrero de 2014 no disponen del código IBAN, las entidades podrían cobrarles por el convertidor.
Para los más rezagados, el Ministerio de Economía ha aprobado una medida temporal que permite a los bancos actualizar las identificaciones de cuentas de CCC a IBAN hasta 2016.
Imagen: tucapital