Con el cambio de modelo para calcular el precio de la luz, los consumidores nos enfrentamos a cuatro maneras diferentes de determinar el coste de la electricidad desde el próximo mes de abril, las cuales dependerán principalmente del tipo de contador de que dispongamos.
- Contador inteligente: El precio dependerá de lo que marque el mercado cada hora. El mercado mayorista eléctrico fija un precio que es usado por las empresas generadoras de electricidad para vender su producto a las comercializadoras. Según el ministro de Industria, los consumidores que utilicen este sistema se beneficiarán de los menores precios en las horas valle. Antes de acabar 2018 todos los contadores deben ser inteligentes y las empresas eléctricas están en proceso de sustitución de los contadores tradicionales, por lo que ya han avisado que no hay tiempo de finalizar estos cambios para abril, no solo por la imposibilidad de cambiar todos los contadores, sino por la inexistencia del software adecuado para su gestión y control.
- Contador normal: El cálculo se realizará por el consumo bimestral multiplicado por el promedio del precio de la electricidad en ese mismo periodo de tiempo. Desde las organizaciones de consumidores ya se ha avisado de que esto incumple la normativa, ya que no conoce con antelación el precio por el que se va a facturar.
- Tarifa plana anual: El Ejecutivo ha creado este nuevo tipo de facturación, y los precios deberán ser publicados en Internet por las empresas suministradoras para que sus clientes los conozcan. Se prevé que el precio será más elevado que el de mercado ya que las empresas intentarán protegerse si el precio sube durante ese periodo de tiempo.
- Acuerdos bilaterales: Esta opción ya existe pero es muy poco utilizada. Solo la usan los grandes consumidores industriales y con poca satisfacción por los altos precios que pagan.