Al igual que sucedió en Semana Santa, el verano ya está aquí y la gasolina vuelve a tener precios históricos y, por supuesto, por las nubes. Y es que, el precio de la gasolina se ha situado en 1,448 euros de media, su precio máximo en lo que va de año y su mayor nivel desde septiembre del año pasado; al menos, así queda patente en el Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE).
Esta semana, momento en el que muchos españoles comienzan a disfrutar de sus bien merecidas vacaciones veraniegas, coincide con un encarecimiento de la gasolina de un 1,4%. Es decir, que el precio de la gasolina es un 2,9% superior que en el mes de enero y un 1,6% más cara que la misma semana del año pasado. El gasóleo no se queda atrás y sube un 1,5% en esta semana, alcanzando un valor de 1,34 euros, su precio más alto desde febrero de este año.
Tomando como referencia los datos del Boletín Petrolero de la UE, el gasóleo, consumido por casi el 80% del parque automovilístico español, cuesta, a día de hoy, un 1,2% menos que en enero, pero un 0,5% más que la misma semana de 2013.
La causa de este aumento de precios recae, en esta ocasión, en el conflicto iraquí, posicionando el barril de crudo Brent en bolsa a 114,3 dólares. Lo curioso es que, con las tensiones de los países exportadores de crudo, el importe de la gasolina y el gasóleo se disparan rápidamente en bolsa y a nivel de los usuarios; pero cuando estas tensiones ceden y el precio en bolsa se estabiliza, los importes marcados en los surtidores de las gasolineras en España se siguen manteniendo por las nubes.
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