Si el pasado 6 de mayo hubo elecciones en Grecia, ya podemos afirmar que el mes que viene habrá otras, no ha habido manera de llegar a unos acuerdos básicos y así es imposible formar un gobierno de coalición. Los ciudadanos lo saben y creen que al final abandonarán el euro, el dracma se devaluará y como consecuencia, se prohibirá sacar fondos del país, que es lo que llamamos corralito.
A sabiendas de esto, los griegos han comenzado a retirar su dinero del país y ya han salido 700 millones de euros desde el 6 de mayo, tal y como lo ha confirmado el presidente del banco central heleno, George Provopoulos, al presidente de la República, Karolos Papoulias.
“Provopoulos me dijo que de momento no hay terror pero si que hay gran temor a que la situación pueda derivar en un pánico bancario“, explicó el presiente Papoulias.
Aunque el plan de ayuda a Grecia, que está financiado por la Unión Europa (UE), el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), exige a cambio austeridad al país, y “no se puede renegociar”, los mercados tienen miedo de que con estas nuevas elecciones los más radicales ganen votos y terminen por abandonar las medidas dictadas desde Bruselas.
“Es un programa de ayuda preparado de forma minuciosa y no se puede renegociar”, declaró el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schauble, tras saber del fracaso de las negociaciones para formar gobierno.
Por último, Yannis Ioanniodes, profesor de Economía la Tufts University, en Massachussets, ha señalado que el riesgo de que a los bancos les entre el pánico en Grecia “es un problema muy serio” y que la única forma de evitar el contagio al resto de países más débiles en Europa, es que el BCE garantice los depósitos de los que han prestado dinero al país heleno.
[…] situación económica está tensa, los mercados temen un posible contagio si Grecia abandona por último la zona euro – recordemos que se van a producir unas nuevas elecciones ante […]