Nadie conoce el futuro de las entidades bancarias nacionalizadas – Bankia, CatalunyaCaixa, Novagalicia Banco y Banco de Valencia -, ya que la banca sana no tiene ningún interés por ella y porque, en parte, lo que se vaya a hacer con ellas es asunto de Bruselas. Por su parte, el Banco de España no descarta cambiar el modelo de venta de este tipo entidades, que hasta ahora era en subasta pública.
César González-Bueno, consejero delegado de Novagalicia, ha insinuado que el Banco de España va a maximizar el valor de venta de las entidades y no va a premiar más las operaciones de otras entidades que permitan que el Estado se desprenda de lo que no vale a cualquier precio. De esta manera se intentaría no malvender las entidades del FROB.
NCG Banco desea sanearse a través del llamado banco malo para antes de finales de este año y así poder ser clasificado como banco puente para seguir en un proceso de compra por parte de los inversores privados en un tiempo máximo de 5 años. Para eso, primero hay que aclarar todas las dudas que existen sobre la reforma financiera.
El Gobierno no quiere alargar demasiado esta situación y se habla de que se puede abrir, por parte del supervisor bancario, un proceso de subasta «simultánea y concertada», en el que el Banco de España sacaría a la venta todas las entidades maltrechas a la vez para que los grupos sanos, en función de sus necesidades e intereses, pujarán por ellas. Dependiendo de la puja, una entidad iría a un grupo u otro y así se aceleraría el proceso y se maximizaría el precio de venta.