960.000 millones para el periodo 2014-2020, esa es la cifra a la que se ha llegado como techo de gasto para la Unión Europea en la reunión que mantienen los jefes de Estado de los Veintisiete. Aún a la espera de cerrar el reparto del dinero entre políticas y Estados miembros, esta cifra supone un recorte de 34.000 millones de euros en comparación con las anteriores cuentas.
Centrándonos en el marco presupuestario, el recorte alcanza los 13.000 millones de euros y el presupuesto total es de 908.000 millones de euros para pagos, con la posibilidad de añadir 12.000 millones de forma extraordinaria.
Las discrepancias han estado a la orden del día en las negociaciones. Mientras Reino Unido, Alemania, Suecia y Finlandia piden más austeridad; Francia, España e Italia apuestan por rechazar recortes en políticas agrícolas y de cohesión. La novedad en el presupuesto consiste en la creación de un fondo que combatirá el paro juvenil.
Dados los resultados de las últimas negociaciones, España obtendría 500 millones de euros adicionales para las políticas de agricultura. De hecho, el borrador propone que “un número limitado de Estados miembros que se enfrentan a retos estructurales particulares en el sector agrícola o que han invertido fuertemente” en el desarrollo del sistema de pagos directos de la Política Agraria Común (PAC) de la UE reciban “asignaciones adicionales“.
En lo que administración pública respecta, las cuentas se han limitado a tan sólo 1.000 millones de euros. Para España esto significa la reducción de las compensaciones a 1.824 millones de euros, frente a los 2.800 propuestos en noviembre.
Imagen: lainformacion
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