Partiendo de los datos del estudio elaborado por la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores, UATAE, durante los últimos cinco años, España ha perdido 403.109 autónomos; lo que significa un ritmo de reducción de más de 220 autónomos por día.
A finales del mes de febrero, España disponía de 2,99 millones de autónomos. Es decir, casi un 12% menos que los registrados hace un lustro (3,39 millones). Esto, sin duda, no hace más que reforzar la extrema dureza de la crisis económica del país así como su repercusión en el colectivo de autónomos.
Si segmentamos por sexos, es el caso de los autónomos varones el más elevado, alcanzando un 84,5% de pérdidas; mientras que en el caso de las mujeres dicha cifra se contiene en los 15,4%. La enorme diferencia se debe, básicamente, a la gran expulsión de la mujer del mercado de trabajo desde 2008.
Si hace 5 años, las mujeres representaban el 32,3% del autoempleo, en febrero de 2013 esta cifra se ha incrementado hasta el 34,5%. Ahora queda en manos del Gobierno activar las políticas necesarias para facilitar que estos nuevos proyectos se mantengan viables.
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