Ha sido el propio representante en el consejo de gobierno del BCE, Jörg Asmussen, quien ha solicitado que la unión bancaria empiece a funcionar “en paralelo” a más tardar durante el primer semestre de 2014.
“Queremos hacer progresos en todos los elementos de la unión bancaria en paralelo”, resaltó Asmussen al llegar a la reunión del Ecofin para la discusión sobre la unión bancaria. “Es una precondición para superar la actual fragmentación en los mercados financieros europeos” y “para que los bancos vuelvan a dar créditos, especialmente a las pymes”.
“Queremos un régimen europeo único de liquidación junto con una autoridad única de resolución y un fondo único de resolución financiado con una tasa a la industria financiera y esto debería empezar a funcionar en paralelo con el mecanismo único de supervisión, esperemos que en verano del año que viene“, sostiene el banquero alemán.
Asmussen también ha confirmado que antes de asumir las tareas de supervisión, el organismo monetario realizará en 2014 “una revisión en profundidad de la calidad de los activos de los bancos que supervisaremos”, en colaboración con los bancos centrales nacionales y expertos externos. Este examen se extenderá a 130 bancos de la eurozona; es decir, el 85% de los activos bancarios.
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