Estas bonificaciones, que todavía no han entrado en vigor, supondrán una pérdida de ingresos para el Estado en caso de no aceptar la UE la propuesta del presidente del Gobierno.
Esta propuesta ha tenido lugar durante la clausura de la jornada organizada en el Instituto Berggruen de París sobre el futuro de Europa. En este evento han participado, además de Mariano Rajoy, el presidente francés, François Hollande, y el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schauble, entre otros.
El jefe del Ejecutivo de España ha hecho especial hincapié en la necesidad de que la UE se comprometa con políticas que luchen contra el desempleo juvenil. Además, Mariano Rajoy ha dejado claro que considera que si la UE siguiera por la línea que él propone se conseguirían fomentar la bonificación de los contratos.
Según los datos de las fuentes del Gobierno, en el caso de que la UE aceptase el proyecto, España ‘ahorraría’ en el déficit entre 2.500 y 3.000 millones de euros.
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