Soraya Sáenz de Santamaría ha confirmado lo que todos esperaban desde hace tiempo. El Gobierno va separar, del modo que jurídica y legalmente se pueda, los activos inmobiliarios que están en posesión de las entidades financieras, aunque no ha concretado si esa decisión la tomará en el próximo Consejo de Ministros del 11 de mayo.
Sáenz de Santamaría señaló durante la rueda de prensa posterior a la reunión semanal del Gobierno que: “no tiene por qué ser el Gobierno, sino que lo puede aprobar el ministro“.
Además de eso, la vicepresidenta del Gobierno español afirmó que los elogios del Banco Central Europeo sobre las reformas que viene aprobando el Ejecutivo central sirven de motivación para continuar con los cambios necesarios en nuestro sector financiero y aclarar todas los miedos que, en relación con los activos tóxicos provenientes del ladrillo, puedan tener las entidades financieras en sus balances.
A este respecto, Sáenz de Santamaría insistió en que el desde el Gobierno de España se buscan las formulas más adecuadas para que los bancos y cajas de ahorros puedan mejorar sus niveles de solvencia, su imagen y su capacidad para hacer fluir el crédito, al solucionar el problema que para estas entidades disponer de esos activos que pierden su valor día tras día.
De entre todas las posibilidades, la vicepresidenta comentó que desde el Ministerio de Economía y Competitividad lo que se busca es conseguir un sector bancario “fuerte, solvente y de reputación” mediante el aislamiento de esos activos.
En relación al proceso de reestructuración de las entidades financieras, Luis de Guindos, titular de Economía comentó que unos días se seguirán produciendo fusiones ya que el plazo para que estos procesos de integración se den por terminados y el Gobierno conozca los detalles, termina al final de mayo.
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