De nuevo el gobierno del PP aprueba un proyecto de ley para favorecer a las empresas. Se trata de la reforma de las mutuas colaboradoras de la Seguridad Social y el real decreto de la gestión de la incapacidad temporal (IT).
Según Fátima Báñez, ministra de Empleo, la nueva ley servirá para clarificar y sistematizar el régimen jurídico de las mutuas, además, por supuesto, de mejorar el sistema de prestaciones en favor de los trabajadores y la prevención de riesgos laborales. El objetivo real es el limitar el dinero destinado a la IT y reducir, a la vez, el tiempo medio de baja del trabajador.
El Gobierno estima que con esta nueva reforma en la gestión de la IT ahorrarán 300 millones de euros anuales en prestaciones. Y es que, con esta ley, dependiendo de nuestro puesto laboral, edad y la patología que tengamos, los médicos ya tendrán tablas con los días de baja estipulados que nos puedan corresponder. Qué cosas, para eso sí somos iguales.
Y no tendremos que ir al médico de cabecera para obtener los partes, pues este trámite quedará incluido en la previsión del seguimiento clínico (¿de las mutuas?). Además, los plazos para que la inspección médica de los Servicios Públicos de Salud o el médico de cabecera comunicen a la mutua y al Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) el alta o la continuidad de la baja, a pesar de que la mutua haya solicitado el alta médica, se reduce a un plazo de cinco días hábiles
El texto limita las cuantías con las que se constituirán las reservas de estabilización en cada ámbito de la gestión, con el objetivo de que el excedente de cotizaciones que acumulan las mutuas se reintegre a la Seguridad Social. Así, el Ejecutivo liderado por Mariano Rajoy esperar recaudar 2.000 millones de euros más, procedentes de la reserva de estabilización de contingencias profesionales.
