La honorable presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, que se había convertido en el azote de todos los españoles, argumentando que si algo tenía que reprocharle al nuevo Gobierno era que no recortase más, ha dinamitado el objetivo del déficit nacional con una notable contribución y un desvío de sus propias cuentas, deficitarias en más del doble de lo anunciado para 2011.
La presidenta de los populares madrileños, que había presumido de dirigir la Comunidad que más cumplía con sus objetivos, se guardaba en la manga la cifra real del 2,2%, en lugar del 1,13% que anunció a bombo y platillo. Ese desvío de las cuentas madrileñas, dado el peso que supone Madrid para el conjunto de España, contribuye de manera decisiva a ahondar la crítica situación de las cuentas del estado, también dañadas por el incumplimiento de otras dos comunidades gobernadas por el PP, Valencia y Castilla-León.
De esta manera, el déficit español ha debido recalcularse de nuevo y ahora se sitúa en el 8,9%, es decir 4 décimas por encima del 8,5% fijado por el Gobierno de Mariano Rajoy. Da la casualidad que la noticia ha formado un gran revuelo, ya que en este caso la ‘herencia recibida’ por el Gobierno estaba en las propias arcas del PP. De hecho cabe señalar que el PP preside la Junta de Castilla-León desde el año 2001, mientras que Valencia y Madrid son dirigidas por los populares desde hace casi una década.
Sin embargo, la presidenta de la Comunidad de Madrid se ha defendido argumentando que comunicó a Hacienda el desvío del déficit de su Comunidad en cuanto supo que era otro. ¿Por qué entonces se ha mantenido oculto? Imagino que no tendrán que pensar mucho.