Jürgen Stark, ex-economista jefe del BCE, a través de una entrevista publicada en el periódico alemán “Handelsblatt“, afirma que la coyuntura económica “se recrudecerá a finales de otoño y entraremos en una nueva fase de lucha contra la crisis“, algo que ocurrirá después de la celebración de las elecciones alemanas, el próximo 22 de septiembre.
Para el experto alemán “los programas de compra de bonos soberanos deberán entrar en funcionamiento en España e Italia. Sin embargo, la presión de Francia para poder utilizar el instrumento sin tener que acudir al rescate será enorme“.
Stark señala también que la situación hará replantearse el papel que desempeña el Banco Central Europeo y su liderazgo para reconducir la situación, ya que “lo que actualmente experimentamos no tiene ya nada que ver con el papel originario que queríamos para el BCE, con un mandato muy limitado centrado en la estabilidad de precios“.
Hace un año, el Banco Central Europeo decidió comprar deuda soberana de los países con más problemas económicos de la eurozona para reducir la tensión de los mercados, y a cambio esos países debían acometer una serie de ajustes en su economía, algo que no gustó al Bundesbank alemán, ya que considera que el BCE se está extralimitando en sus funciones y se dedica a financiar a los estados.
Stark cree que, con esta medida, “Draghi compró tiempo a los gobiernos en Europa. Sin embargo, este tiempo no se ha aprovechado. Italia parece incapaz de emprender reformas, Portugal padece una grave crisis de gobierno y sigue existiendo, como al principio, la ilusión de que Grecia está en la situación de poder reducir su deuda de manera independiente. Los gobiernos dejan las cosas para otro día y confían en el BCE“.