El Ministerio de Empleo pagó a la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) 50.000 euros por un informe en el que el organismo elogiaba la reforma laboral de la ministra Fátima Báñez, señalando que iba en “la dirección correcta”, al haber “promovido la flexibilidad interna en las empresas y ha reducido los costes ligados al despido para los trabajadores indefinidos”.
El costo que los españoles han debido asumir de su erario público para que el Gobierno viese respaldada su polémica reforma laboral, ha sido reconocido por el propio Ejecutivo del PP, en respuesta a una pregunta de la diputada socialista Pilar Lucio.
Como no podía ser de otra manera, el Gobierno del PP recordó en su respuesta que quien primero analizó el impacto de la reforma laboral del Ministerio de Empleo fue sus propios técnicos y que fue la mismísima ministra Fátima Báñez quien presentó las conclusiones en el Congreso de los Diputados.
Báñez realizó esa valoración en agosto de 2013, cuando había transcurrido un año de la entrada en vigor de una reforma laboral que ha mermado drásticamente las condiciones laborales de los españoles, con un buen hachazo en materia de derechos, bajada considerable de los salarios, congelación del salario mínimo, facilidades para el despido, colectivos sin convenios…
Aunque para el Gobierno del PP, el trabajo de la ministra y su exposición dejaban más que claras las bondades de su reforma, el Ejecutivo de Mariano Rajoy quiso que se complementara ” con un informe externo, realizado por un organismo independiente de reconocido prestigio como es la OCDE, y cuyo coste económico ascendió a 50.000 euros”.
Los 50.000 euros sirvieron para que la organización se deshiciese en elogios a favor de la reforma y señalase que se ‘iba en la dirección correcta’; además solicitaban al Gobierno que abaratara aún más las indemnizaciones por despido, que se moderasen aún más los salarios y que se ampliaran los períodos de prueba.
El Gobierno del PP, en su respuesta parlamentaria, ha querido señalar que el informe de la OCDE valoraba muy positivamente la reforma laboral, a la que calificaba de ‘valiente’ y de “un buen paso que ha traído más dinamismo al mercado de trabajo”. Claro que por 50.000 euros, la OCDE cortó un traje a la medida de Fátima Báñez para que también sentara muy bien a Mariano Rajoy.
Foto | Gobierno de España. Ministerio de Empleo y Seguridad Social
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